Me enseñaron en la escuela.

Chile fue nación independiente desde que el primer mapuche puso resistencia al Inca, cuando llegó el español trato conquistar pero, Lautaro, Galvarino y Caupolican mismo sostuvo esa tierra libre y soberana por más de 200 años, y por sobre el imperio español. mapuche era prestigio de combate y heroísmo. Incluso Alonso de Ercilla dedicaba versos a sus enemigos, en su canto de gesta uno escrito fuera de Europa.
Después cuando joven me dijeron que eran borrachos y poco organizados que eran violentos y que no tenían leyes que eran salvajes, que tenían que ser NORMALIZADOS por los chilenos, y los combatimos y conquistamos. Se entregaron al valor, que nosotros arbitrariamente, le dimos a sus tierras. Nosotros hicimos a la fuerza lo que el español no pudo. Ser mapuche ya no era digno.
Luego me dije vamos! los mapuches no son lo que ellos dicen. Y todos, si queremos verlo, tenemos sangre mapuche. En ese instante me dijeron tu eres blanco no puedes ser mapuche. Argumentable, pero encuentro fascinante la historia mapuche y como logra trascender, por sobre las culturas dominantes, no se rinde ni se doblega, y es capaz de negociar, es instintivamente inteligente, es astuto y perspicaz, es capaz de aguantar y aprender lo que odia, para lograr hacerlo cambiar, y siento que el color no me hace menos mapuche.
Creo y estoy convencido, que es un honor sentir que está historia, más vieja que la historia de Europa en mi tierra, es mia y digna de admirar, y hoy que Chile mismo atropella a su pueblo nativo más importante, no me puedo callar.

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